La Trampa de la Mentira: Cómo las Falsedades Afectan Tu Salud Mental, Según una Psiquiatra

En un mundo donde la presión social y el deseo de evitar conflictos a menudo nos empujan a desviaciones de la verdad, es fácil caer en la trampa de la mentira. Sin embargo, según la reconocida psiquiatra Marian Rojas Estapé, esta práctica aparentemente inofensiva puede tener consecuencias devastadoras para nuestra salud mental, atrapándonos en una “jaula emocional” de la que es difícil escapar.
Rojas Estapé, experta en neurociencia afectiva y autora de varios bestsellers, explica que la mentira, incluso la más pequeña, activa en nuestro cerebro mecanismos de estrés y ansiedad. Cuando mentimos, nuestro cuerpo detecta una incongruencia entre lo que decimos y lo que realmente sentimos, lo que genera una respuesta de alerta que consume energía mental y emocional.
El Ciclo Vicioso de la Mentira
La mentira rara vez es un acto aislado. A menudo, una pequeña falsedad inicial lleva a la necesidad de mantenerla, creando una red cada vez más compleja de engaños. Este ciclo vicioso puede generar una profunda sensación de culpa, vergüenza y miedo a ser descubierto, lo que a su vez alimenta la necesidad de mentir aún más para proteger la mentira original.
“La mentira es como una bola de nieve que va rodando cuesta abajo”, afirma la psiquiatra. “Cuanto más grande se hace, más difícil es detenerla y más daño causa en nuestro camino.”
¿Por Qué Mentimos?
Las motivaciones para mentir son variadas. Algunas personas mienten para evitar conflictos, proteger su imagen, obtener beneficios o manipular a otros. Otras mienten como un mecanismo de defensa para ocultar inseguridades, traumas o sentimientos negativos.
Sin embargo, independientemente de la razón, la mentira siempre tiene un costo. Afecta nuestra autoestima, deteriora nuestras relaciones interpersonales y nos impide vivir una vida auténtica y plena.
La “Jaula Emocional”
La psiquiatra Rojas Estapé utiliza la metáfora de la “jaula emocional” para describir el estado en el que se encuentran las personas que viven bajo el peso constante de la mentira. Esta jaula se construye con los muros del engaño, el miedo y la culpa, impidiendo que la persona se conecte con sus verdaderos sentimientos y necesidades.
Dentro de esta jaula, la persona se siente aislada, incomprendida y atrapada en un ciclo de falsedades que la aleja cada vez más de su verdadero ser.
Rompiendo la Jaula: El Camino Hacia la Verdad
Liberarse de la jaula de la mentira requiere valentía, autoconciencia y compromiso. El primer paso es reconocer el problema y asumir la responsabilidad de nuestras acciones.
Esto implica ser honestos con nosotros mismos y con los demás, incluso cuando la verdad sea dolorosa. También implica aprender a manejar las emociones difíciles, como la culpa y la vergüenza, de una manera saludable.
La terapia psicológica puede ser una herramienta valiosa para ayudar a las personas a identificar las causas subyacentes de sus patrones de mentira y a desarrollar estrategias para vivir una vida más auténtica y honesta. Al final, la verdad es la única forma de liberarnos de la jaula y recuperar nuestra libertad emocional.