En la actualidad, las instituciones de educación superior (IES) enfrentan numerosos desafíos que pueden afectar su sostenibilidad y excelencia educativa. Por lo tanto, es fundamental que las universidades prioricen la gestión integral de riesgos para minimizar los posibles impactos negativos y garantizar su continuidad. La gestión del riesgo en IES implica identificar, evaluar y mitigar los riesgos asociados con la gestión académica, financiera y operativa. Al implementar prácticas de gestión de riesgos efectivas, las instituciones educativas pueden reducir la incertidumbre, mejorar la toma de decisiones y aumentar la confianza de los estudiantes, profesores y la comunidad en general. Además, la gestión del riesgo también puede ayudar a las IES a mejorar su reputación y competitividad en el mercado educativo, lo que a su vez puede contribuir a su sostenibilidad a largo plazo. Por lo tanto, es esencial que las universidades inviertan en la gestión de riesgos para asegurar su futuro y continuar brindando educación de alta calidad.